Por su
parte, la ACBC pide que se declare Parque Nacional, además de toda una serie de
solicitudes como la elaboración de un plan de control de las poblaciones de
gatos, la creación de más plazas de agentes de medio ambiente, un plan de
vigilancia y control de residuos en zonas naturales, medidas correctoras en
tramos de carreteras, tendidos eléctricos y líneas telefónicas en los que se
haya determinado mediante un estudio previo su peligrosidad o “suprimir la
especulación en el PORN” porque los núcleos urbanos ya han superado su
capacidad de carga en cuanto a número de habitantes.
También
pide promover el turismo de calidad, sostenible y respetuoso con el medio
ambiente, elaborar un plan integrado de control de especies invasoras, regular
el acceso a determinadas zonas protegidas en épocas de reproducción de la
fauna, limitar el número de coches que circulan y estacionan en la zona de
Famara y en La Graciosa, prohibir la extracción de áridos en zonas de la Red
Natura 2000 y restaurar el hábitat.”
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