domingo, 30 de junio de 2013

Nos vamos de parranda



Cogemos el barquito e izamos las velas y nos vamos de parranda.


Ya han pasado unos días en que la Isla de La Graciosa vibro con la música parrandera; que por cierto, es un acontecimiento musical que cada dos años se celebra por parte de la Parranda Los Toledo, que además, son los promotores y organizadores de este evento musical, lleno de buena música canaria.  


Desde este humilde blog y me atrevo a decir, que en nombre de muchos que ese día nos reunimos en el pequeño parquito graciosero, agradecer a los organizadores por hacernos participe y poder disfrutar ese día. Muestra de mi agradecimiento, aquí  un pequeño homenaje de lo que allí aconteció y que mi cámara captó.

¡¡¡Pues!!! Cámara y acción…
Vamos de parranda…
















domingo, 23 de junio de 2013

Glamour y suciedad






Glamour mucho glamour; tacones altos en una zona de arena, en el que el asfaltado no existe, como en este paraje natural, es un reto para las mujeres más valientes que se atreven a navegar por las calles gracioseras.


Pero aquí no vamos a escribir de glamour, ni de tacones, ni por supuesto tampoco de chancletas. Vamos a pegar “un tirón de orejas” a las personas que utilizan un espacio público y tras su salida, lo dejan todo hecho un desastre cómo podemos ver en las instantáneas que aquí quedan expuestas.



Aparte del “Si quiero” en el altar, también deberían afirmar “Si quiero… dejarte limpia”, como te encontré.

Siguiendo con el rito nupcial y llegando a la palabra de las promesas, diré: Isla de La Graciosa “te prometo” que dejaré todo y tal como estaba, o mejor, si cabe, para así expresar mi agradecimiento hacia el lugar que nos acogió y fue testigo de nuestra unión matrimonial.


Ya terminada la ceremonia, empieza la fiesta, música, baile y diversión, que para eso es la ocasión. Pero, como toda fiesta tiene un principio y un final, ¿que mejor para acabarla que unos voladores?


Cuando los voladores dejen de sonar y hayan acabado todas la explosiones artificiales, prometo que diré: “Si te limpiare”.

Si quiero, que se sigan celebrando acontecimientos nupciales en la Isla de La Graciosa y si quiero que después de tal acontecimiento, tengan la decencia de dejar, en este caso la playa, tal y cómo la encontraron.